domingo, septiembre 10, 2006

El área de comunicación: una necesidad escolar

Hace poco quedé sorprendido cuando asistimos al 6º Encuentro de Medios Escolares en la Universidad de la Sabana en Bogotá, Colombia. Una cantidad de niños de diferentes colegios, junto con sus profesores (muchos de ellos comunicadores o realizadores audiovisuales), asistían al evento para mostrar sus productos comunicativos en prensa, radio, televisión, video y medios digitales, todos producidos por ellos, desde sus realidades escolares. Hace seis años, cuando trabajaba en el colegio Jordán de Sajonia en Bogotá, asistimos a la primera versión de ese evento y la realidad era otra. La participación no era tan masiva, los alumnos no iban acompañados de comunicadores, sino de sus profes de español, literatura, o de pronto de sistemas. En sólo seis años se percibe entonces en el ambiente educativo colombiano, por lo menos en el bogotano, un creciente interés por vincular cada vez más la enseñanza de los medios, con los medios o para los medios a la cotidianidad del aula.

Pero a pesar de los seis años que han pasado, y de los muchos más, aproximadamente 15, para algunos colegios 20 años de experiencia haciendo medios escolares, existe algo que aún se presenta como carencia en las instituciones educativas. Sí, hay periódicos escolares, la emisora del colegios funciona, se estimula el uso y producción del video y hasta se empiezan a realizar muestras multimedia y del uso de Internet a través de naciente periodismo digital escolar, incluso ya en varios colegios la comunicación aparece como una materia que se dicta en profundizaciones o énfasis que ofrece la institución. Pero hay algo que sigue faltando.

Ese “algo” que hace que muchas veces sea difícil producir en los medios; porque el profesor es de otra materia y saca de su tiempo libre para trabajar con sus estudiantes; porque si bien, tenemos emisora, no tenemos nada que ver con los que hacen el periódico; porque nuestra experiencia sigue siendo aislada, sin integrar las demás asignaturas; porque una vez se vaya aquel que le “metía el hombro” a todo, ese profe que se quedaba por las tardes o trabajaba en su casa para la edición del periódico, o las ediciones de video, se termina todo y el medio escolar pasa a la historia.

Ese “algo” que nos sigue faltando es la creación formal de un área de comunicación, pero no al estilo de una materia más, sino como un departamento, como un espacio tanto académico como formativo, tanto administrativo como institucional. Eso es lo que necesitamos: la institucionalización de la práctica educativa de la comunicación escolar en nuestros colegios. Sin atreverme a decir que es la única forma a través de la cual podremos sobrevivir los docentes y estudiantes que hacemos esto desde hace varios años, estoy seguro que es a partir de la creación de un DEPARTAMENTO DE COMUNICACIÓN ESCOLAR, donde se pueden integrar todos los medios creados o por crear en el colegio, donde sus dinámicas se vuelven sólidas, donde estudiantes y docentes acuden para hacer productos comunicativos, no sólo informativos para hacer noticieros, periódicos o transmisiones de radio, sino para aplicar sus clases, para comunicarse “escolarmente”.

lunes, septiembre 04, 2006

Ser Comunicador Escolar

Eso es algo que muy poca gente entiende. ¿A qué te dedicas?. Soy ingeniero, consultor financiero, trabajo en una empresa de outsourcing, soy gerente, socio de una firma, administrador de empresas, en fin. Muchas profesiones y cargos se ventilan en las respuestas a esta pregunta en cualquier reunión social. No es la primera vez que me pasa, pero cuando digo que soy comunicador social surge la siguiente y nueva pregunta: ¿Trabajas para un medio?, ¿En qué canal trabajas? ¿En qué emisora de radio? ¿Escribes para una revista?. La respuesta es no. O mejor sí. Y contundente. Escribo en periódicos, hablo ante los micrófonos, presento y grabo en cámara, es más, hago que otros lo hagan y se emocionen haciéndolo, enseño a hacerlo día a día, pero no en los grandes medios, no me saludan por aparecer en televisión. Todo eso ocurre en el aula, en los corredores y pasillos, en el recreo, en los buses, en las conversaciones del colegio al que me he negado dejar de asistir. La respuesta es sí, hago todo eso porque soy comunicador escolar, porque soy profesor en un colegio enseñando lo que más me gusta: hacer comunicación desde la dinámica de los sueños y pasiones de los niños, niñas y jóvenes de colegio. Soy tan niño como ellos y tan comunicador como cualquier otro de aquellos famosos que poco enseñan teniendo tanto poder.

Últimamente me da pereza la respuesta, porque cuando digo que soy comunicador escolar tengo que dar muchas explicaciones y cuando digo que soy profesor inmediatamente cambian de tema. Qué lastima que dos profesiones y oficios tan lindos no tengan la importancia social que se merecen. Que lástima que seamos tan pocos trabajando en esto. Esta es la invitación: únanse a esta causa, hagamos una reunión social donde nos gastemos la lengua al afirmar que somos comunicadores escolares.